En un mundo tan abierto e interconectado como el de hoy, tener una cultura inclusiva es algo a lo que todas las organizaciones deben aspirar. Pero esto no quiere decir que debemos simplemente contar con una plantilla de colaboradores diversa. Lo más importante es promover una cultura de inclusión dentro de la organización.

Lograr sinergia en equipos de trabajo con personas de diversas culturas, costumbres, formas de pensar y características, generará una dinámica mucho más rica en creatividad, innovación, productividad y, según estudios, mejores resultados comerciales.

Para que esta sinergia suceda, debemos brindar a todos los colaboradores un ambiente y una cultura laboral cómoda y propicia. Una cultura sin prejuicios ni diferencias. Esta responsabilidad comienza por los líderes con los cargos más altos y alcanza a cada uno de los miembros de la organización.

Por eso, desde FranklinCovey diseñamos esta guía con seis consejos que te ayudarán a contribuir en la creación de una cultura laboral más inclusiva y a estar preparado para no caer en nuestros prejuicios inconscientes. 

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